Taludes convertidos en pequeños microhábitats
A finales de 2019 el Ayuntamiento de Madrid reformó dos taludes en el distrito de Moncloa-Aravaca, uno ubicado en la calle Rosa de Luxemburgo y otro en la calle Valdesangil. Con estas actuaciones, además de enriquecer el paisaje urbano y mejorar la accesibilidad de la ciudadanía se fomenta la biodiversidad de este pequeño microhábitat y de los entornos colindantes.
El talud de la calle Rosa de Luxemburgo se ha convertido en el hogar de muchos insectos que se alimentan del néctar de las flores y se refugian en las rocallas que se han instalado. Al estar florecido prácticamente durante todo el año se favorece la llegada continuada.
El nuevo diseño está formado por ocho jardineras instaladas en bancadas. Una combinación de plantas de diferentes especies y con gran variedad de colores tanto de hojas como de floraciones incrementa el valor estético del antiguo talud. Destacan las hortensias, Cotinus coggygria, Cotoneaster dammeri o Nandina doméstica y los Mesembrianthemus por sus colores vivaces y por su verdor los Phormium y las tuyas.
La disposición de la vegetación engalana este antiguo talud gracias a los contrates cromáticos que aporta la variedad de especies. Para delimitar esta zona ajardinada se han incluido plantas de porte arbustivo (Phormium y tuyas) en las jardineras superiores y en los laterales. Además, se ha reforzado la protección con la colocación de un vallado perimetral en la zona estancial situada en la parte alta del talud.
En cuanto a las jardineras, se ha optado por materiales sostenibles. Están formadas por varias traviesas de madera solapadas entre sí y sujetadas con postes del mismo material. Para proteger y evitar el contacto con las humedades y el agua de riego, todas las bancadas están impermeabilizadas.
Sin obstáculos en el talud de la calle Valdesangil
Otro de los taludes renovados recientemente en el distrito Moncloa-Aravaca se ubica en la calle Valdesangil. En esta zona verde las actuaciones también se han centrado en transformar la superficie erosionada en una pequeña infraestructura verde en la que se han combinado plantas con diferentes volúmenes y colores.
Se ha creado un muro de bloques para la contención de tierras y en la parte central de la pendiente se ha instalado una terraza con traviesas de madera que suaviza la inclinación. Los ajardinamientos están compuestos por una variedad de vegetación como Arbutus unedo, Callistermon, Nandina domestica o Teucrium, todos dotados de red de riego por goteo.
Además, las obras también han incluido mejoras de accesiblidad. El Ayuntamiento ha instalado una barandilla en la parte superior, protegiendo así a la ciudadanía de posibles caídas al talud. Por otro lado, para favorecer el acceso de la ciudadanía a la zona estancial ubicada en la parte baja del talud se ha colocado un pasamos en la escalera.