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La piscina del Centro Deportivo Municipal Palomeras, en el distrito de Puente de Vallecas, se convirtió ayer en el escenario de un singular espectáculo que une la danza con la natación sincronizada y la ciencia ficción, incluido dentro de la programación de Veranos de la Villa y producido por este festival.

Cientos de asistente pudieron deleitarse con la pieza, ‘Dragón, descansa en  el lecho marino’, una composición coreográfica para seis nadadoras de natación sincronizada creada por Pablo Esbert y Federico Strate, que también podrá verse hoy en el mismo espacio. Julia Echevarría, Andrea Fuertes, Conchi Iruela, Esther Mora, Carolina Pino e Irene Toledano, pertenecientes al Club Retiro, uno de los dos clubes profesionales de natación sincronizada que existen en Madrid, y dedicadas a este deporte desde la infancia,  son las nadadoras encargadas de dar vida al dragón protagonista de esta historia.

La superficie de la piscina se convirtió en una pantalla en la que las nadadoras representaron a una criatura ficticia, desmembrada y conectada a través del agua. En la competición de la natación sincronizada, el jurado penaliza la falta de sonrisa o apoyarse en el fondo de la piscina. Pero en este espectáculo, el dragón que dibuja la coreografía convive con la diferencia: no siempre sonríe y no sólo se apoya en el fondo, sino que descansa en él. /