Villacís anuncia una campaña de inspección para evaluar los daños estructurales de los edificios tras la gran nevada
- El Área de Desarrollo Urbano analizará las patologías estructurales de los edificios de los que se ha reportado incidencia para garantizar la seguridad de los mismos
- El Ayuntamiento declarará en ruina ‘la Nevera’ del Ramiro de Maeztu para que la Comunidad de Madrid pueda iniciar su demolición de manera inmediata
- Sólo en los primeros días, los daños ocasionados en inmuebles por la borrasca Filomena se estiman en unos 20,75 millones de euros
La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, junto al delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes, y la concejala del distrito de Chamartín, Sonia Cea, ha visitado este martes las instalaciones del IES Ramiro de Maeztu, donde se ha hundido la cubierta de su emblemática ‘Nevera’.
Allí, Villacís ha anunciado que el Ayuntamiento ha iniciado “una campaña de inspección en todo Madrid para evaluar los edificios con desperfectos y hacer una primera estimación”. De momento, desde la Subdirección General de Control de la Edificación del Área de Desarrollo Urbano se han analizado ya 11 inmuebles y hay, al menos, 50 incidencias comunicadas que los técnicos tendrán que atender durante los próximos días.
“Estas estructuras no están preparadas para un fenómeno que ocurre cada 70 años y han vencido. El daño es obvio y eso va a afectar a la actividad deportiva”, ha indicado la vicealcaldesa. Por su parte, Mariano Fuentes ha anunciado que se va a proceder a declarar en ruina “la Nevera”, que fue la sede del Estudiantes y donde entrenan en la actualidad las categorías inferiores, para que la Comunidad de Madrid pueda iniciar su demolición de manera inmediata.
La gran acumulación de nieve sobre las cubiertas, azoteas, marquesinas, salientes y demás vuelos de las edificaciones, particularmente aquellas que cuentan con sistemas constructivos de gran ligereza, ha provocado que las estructuras que las soportan se hayan visto sometidas a sobrecargas que las ha llevado al límite de su capacidad portante, originando su colapso y hundimiento. Otras muchas se encuentran afectadas por patologías estructurales sobre las que será necesario adoptar medidas de seguridad, llegando incluso a la demolición controlada.
Aunque la magnitud y cuantificación económica de todos los daños causados por la borrasca en las edificaciones de la ciudad está aún por determinar y llevará tiempo su valoración, a la vista de las incidencias de las que se tiene constancia a día de hoy, se ha hecho una primera estimación y los daños suponen una cuantía de 20,75 millones de euros: 10 millones por daños en edificaciones públicas, 5 millones en edificaciones privadas y otros 5,6 millones en edificios en construcción.
En el Área de Desarrollo Urbano hay un equipo de guardia activo los 365 días del año, las 24 horas al día, formado por personal técnico especializado en atender las emergencias que afectan a la seguridad estructural de edificios y construcciones. Este es un servicio declarado como ‘esencial’ por los sucesivos decretos de Alcaldía dictados en función de la emergencia surgida en cada momento. En las actuales circunstancias de inclemencias climatológicas derivadas de la borrasca Filomena, con episodios de nevadas de excepcional magnitud, el equipo de guardia ha visto incrementada exponencialmente la carga de trabajo. /