Madrid ya tiene 9.139 calles
- Las apenas 600 denominaciones existentes hace 35 lustros se han convertido en más de 9.000
- En 1835 se elaboraron las primeras normas específicas para nombrar, rotular y numerar calles, plazas, glorietas y bulevares
- El Área de Gobierno de Urbanismo, responsable de la gestión del Callejero, ha incorporado las más avanzadas tecnologías
- El servicio de búsqueda del Callejero en Internet recibe cada año más de 36.000 consultas de ciudadanos e instituciones
El Callejero de Madrid, una extraordinaria base de datos en la que se registran los nombres y numeración de las calles de la ciudad, así como su evolución histórica, cumple este año el 175 aniversario
El Callejero de Madrid, una extraordinaria base de datos en la que se registran los nombres y numeración de las calles de la ciudad, así como su evolución histórica, cumple este año el 175 aniversario de su creación, alcanzando un total de 9.139 viales vigentes. El Área de Gobierno de Urbanismo y Vivienda, responsable de su gestión, ha incorporado los más avanzadas tecnologías para mejorar y ampliar los servicios que esta herramienta presta a ciudadanos e instituciones, de acuerdo con los criterios del Certificado de Calidad ISO 9001/2008.
Aunque la tradición de nombrar las calles es muy antigua -aparecen sus denominaciones en los planos históricos de la ciudad- es a principios del siglo XIX, concretamente en 1835, cuando se elaboraron normas específicas para nombrar, rotular y numerar los viales, incluyéndose en este término tanto las calles, como plazas, glorietas, bulevares, polígonos o urbanizaciones, entre otros. A partir de esa fecha, se estableció que la nomenclatura debía ser única; que el nacimiento y numeración de las calles partiría desde el punto más próximo a la Puerta del Sol, y que los números pares se situarían en la acera derecha y los impares en la izquierda.
Desde entonces, la ciudad ha experimentado un crecimiento progresivo, y de las apenas 600 denominaciones existentes hace ya 35 lustros, se ha pasado a los 9.139 registros vigentes actualmente, a lo que se suman 2.919 viales históricos, que permiten seguir la evolución de Madrid a través de los cambios en la denominación de sus calles. Además, el Callejero incluye 2.170 topónimos y 195.000 numeraciones de portal.
El Callejero, que forma parte esencial de la Base de Datos de la Ciudad, reviste gran importancia como una herramienta a partir de la cual se elabora cualquier tipo de sistema de información geográfica, sobre el que basar aplicaciones tan imprescindibles como el censo municipal, el servicio de correos, los sistemas de navegación, los servicios de urgencia y seguridad, o la localización de actuaciones administrativas.
Modernización del Callejero
El Área de Gobierno de Urbanismo y Vivienda ha introducido tecnologías de vanguardia en su gestión para modernizar los servicios de esta herramienta, que recibe cada año a través del servicio de búsqueda en internet más de 36.000 consultas. En este marco, se ha llevado a cabo la digitalización del archivo histórico del Callejero a partir del soporte existente en microfilm, lo que permite gestionar la información evitando la manipulación de los documentos originales, que quedan así preservados. Además, mediante la incorporación de nuevas aplicaciones, los criterios de búsqueda del Callejero permiten por primera vez reconocer las tildes, de acuerdo con los criterios de la Real Academia Española. Así, ya se puede encontrar el nombre de cualquier calle tanto con tilde como sin ella, cosa que hasta ahora resultaba inviable, y también se pueden buscar denominaciones por aproximación.
Asignación de nombres
Según la normativa vigente, es el Departamento de Cartografía del Área de Gobierno de Urbanismo y Vivienda el responsable de notificar a las Juntas de Distrito los viales disponibles para la asignación de nombre tras la aprobación de los nuevos planeamientos urbanos. A partir de esa notificación, que se acompaña de un estudio de los topónimos históricos del lugar, las Juntas proponen los nombres para calles y plazas. Seguidamente, los expedientes se elevan a la Comisión de Las Artes y, después, al Pleno del Ayuntamiento para su aprobación definitiva.
El origen de los nuevos nombres de calles y plazas es muy heterogéneo. La denominación puede estar relacionada con topónimos anteriores del lugar, recaer en aspectos relacionados con el ámbito de las artes, las letras, las ciencias, la sociedad o la tradición, o corresponder a nombres propios de personas de especial relevancia o vinculación con la ciudad. Concretamente, el Pleno del pasado abril aprobó una relación de 91 nuevos nombres, entre ellos, los de Francisco Umbral, Miguel Delibes, Rocío Jurado, José Vidal Beneyto, Guillermo Luca de Tena y Jaime Campmany. En otros casos, se aprueban nombres de alguna temática concreta para dar homogeneidad a determinado barrio. Por ejemplo, en el barrio de las Rosas (San Blas), la mayoría de las denominaciones se refiere a ciudades y países europeos; en Tres Olivos (Fuencarral) se decidió utilizar nombres relacionados con El Quijote, y en Mirasierra, también en Fuencarral, predominan los nombres de alcaldes de Madrid.
Puede consultarse el callejero por Internet, a través de la dirección www.munimadrid.es/urbanismo, siguiendo la ruta Visualizador urbanístico-Localizar, desde donde es posible verificar las nuevas altas, bajas o modificaciones de nombres, tanto vigentes como históricos, así como numeraciones de portal, que se actualizan semanalmente./