El plan presupuestario 2017-2019 enfocado a la inversión y las políticas sociales
- Se mantiene la política fiscal municipal de 2016, basada en una mayor progresividad y reparto más equitativo de los tributos exigidos a la ciudadanía
- En los tres próximos ejercicios se prevé una reducción del 17,9 % en el pago a acreedores financieros
- Se da protagonismo a las partidas presupuestarias para políticas sociales y servicios con el objetivo de hacer frente a la actual situación de emergencia social y mejorar el bienestar de los madrileños
- La inversión se incrementará en más de un 50 % para estimular la actividad económica y mejorar los servicios a la ciudadanía
- De acuerdo con los objetivos de estabilidad presupuestaria se prevé un escenario de superávits y remanentes de tesorería en los próximos años que permitirán financiar inversiones extraordinarias
- De acuerdo con los objetivos de deuda en los tres próximos ejercicios no se recurrirá al endeudamiento y se irá reduciendo la deuda al ritmo medio de 467 millones al año
El Plan Presupuestario a Medio Plazo, que permite conocer el marco en el que se elaborarán los presupuestos de los tres próximos años, fue aprobado ayer en Junta de Gobierno Extraordinaria. Las previsiones del periodo 2017-2019 contemplan un fuerte incremento en la inversión real y de partidas destinadas a políticas sociales y a servicios a la ciudadanía debido a que el Ayuntamiento debe enfrentar la emergencia social a través de sus políticas públicas.
Para llevar a cabo estas actuaciones no es necesario plantear nuevas modificaciones tributarias, por lo que se mantiene para los próximos tres años la política fiscal municipal aprobada para 2016 basada en una mayor progresividad y reparto más equitativo de los tributos. Ello permitirá presentar superávits y remanentes de tesorería durante los tres ejercicios siguientes que podrán ser utilizados para financiar inversiones extraordinarias e ir reduciendo progresivamente la deuda acorde a los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública.
Se plantean cinco objetivos alcanzables: mantener un sistema fiscal progresivo y justo en el que la carga impositiva se reparta en función de la renta de los contribuyentes, reducir intensamente el pago destinado a los acreedores financieros por intereses de deuda pública, incrementar fuertemente la inversión y el presupuesto destinado a combatir la situación de emergencia social y mejorar el bienestar de la ciudadanía, no volver a recurrir al endeudamiento al mismo tiempo que se reduce la elevada deuda pública, y mantener las propiedades y terrenos públicos con el objetivo de ponerlos al servicio de la mayoría social madrileña.
Se mantiene la progresividad del sistema fiscal
Mientras que el promedio de los ingresos no financieros para los años 2012-2015 alcanzó los 4 610 199 097 euros, se prevé que el relativo a los años 2016-2019 sea de 4 747 582 759 euros, un 2,98 % más. Este aumento se debe fundamentalmente a la mayor recaudación por impuestos directos, por transferencias corrientes y por impuestos indirectos.
El incremento previsto de ingresos por esas partidas contrasta con la menor recaudación por tasas y otros ingresos, con el menor desembolso por enajenaciones de inversiones reales, y con menores ingresos patrimoniales.
La combinación entre un incremento de recaudación por impuestos progresivos que permiten discriminar por la renta (como el IBI para las grandes superficies comerciales) y una notable caída de cobro por tasas y otros ingresos que no permiten esa discriminación, otorga al sistema fiscal de Madrid una mayor progresividad, lo que lo convierte en un sistema de recaudación más justo para los madrileños y madrileñas que en los años anteriores. Además, el menor desembolso por enajenaciones de inversiones reales proyectado para los años 2016-2019 pone de manifiesto que el Ayuntamiento de Madrid no necesitará vender parte de sus propiedades para tener ingresos suficientes, como ocurría en ejercicios pasados, manteniendo así unos recursos y capacidades que serán puestos a disposición de los ciudadanos y ciudadanas de Madrid.
Incremento de la inversión y gasto no financiero
Mientras que el promedio de los gastos no financieros para los años 2012-2015 alcanzó los 3 478 885 849 euros, se prevé que el relativo a los años 2016-2019 sea de 4 045 217 363 euros, un 16,28 % superior. Este incremento se debe a unos mayores gastos en todas las partidas excepto en la de gastos financieros, donde el promedio para 2016-2019 será de 169 751 726,7 euros menos que el promedio para los años 2012-2015, lo que supone una significativa reducción del 60 %. Éste es un cambio muy importante ya que se deja de destinar dinero público a pagar a acreedores financieros que en su mayoría tienen una elevada capacidad económica al tratarse de grandes entidades financieras y fondos de inversión, y permite que ese dinero se destine a las necesidades de la mayoría social y no sólo a las de una minoría privilegiada.
Las partidas de gasto que más aumentarán son: inversiones reales (un 115,1 % más que en los cuatro ejercicios anteriores), gastos en bienes corrientes y servicios (un 15, 7% más), gastos de personal (un 12,1 % más), y transferencias corrientes (un 29,5 % más).
Todos los incrementos de gasto están justificados por su necesidad social y económica, ya que se trata de remuneraciones para personal del Ayuntamiento de Madrid y sus organismos, de gastos del funcionamiento de la ciudad, alumbrado, agua, limpieza, manteniendo colegios, cuidado de parques y jardines, ayudas y subvenciones que el Ayuntamiento concede a otras instituciones y personas como ONG, asociaciones, clubs y las aportaciones a sociedades públicas. En los tres años siguientes se gastará más pero mejor.
Fin al endeudamiento
La mayor eficiencia y eficacia prevista en la utilización de los recursos públicos desembocarán en unos resultados presupuestarios que eviten innecesarios endeudamientos e innecesarios adelantos de amortizaciones.
Durante los años 2012 a 2015 el Consistorio se endeudó en 2 802 847 505 de euros, mientras que en los cuatro años siguientes no habrá nuevo endeudamiento, en línea con la decisión de este equipo de gobierno que pretende financiar las políticas públicas con recursos propios.
Mientras que en los años 2012-2015 se redujo la deuda pública en 2 552 377 835 euros, en los años 2016-2019 la reducción alcanzará los 1 870 116 503 euros. Esta menor cantidad se debe a la estrategia de este equipo de gobierno de no adelantar innecesariamente amortizaciones de deuda ya que ello supondría registrar nuevos costes relativos a la financiación a corto plazo y para así tener más recursos disponibles y poder utilizarlos en beneficio de los madrileños./