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Esta ruta, que circula en su totalidad por caminos asfaltados, tiene algunas de las subidas más duras de la Casa de Campo, como la del Cerro Garabitas o la del Teleférico.

El recorrido permite, además, disfrutar de las increibles vistas de Madrid desde los miradores y los puntos más altos.

Recomendación: Para disfrutar de un descenso pronunciado y las vistas panorámicas de la ciudad, en la carretera del Teleférico, una vez pasado el campo de fútbol, hay que tomar la carretera asfaltada que sale a la izquierda.

Por este tramo circulan los coches en horario de apertura del teleférico, por lo que hay que tener cuidado.