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Manuela carmena en la entrega de premios del Concurso Internacional Multi-Comfort House Arquitectura

Madrid apuesta decidida y firmemente por la sostenibilidad frente a posturas como la del presidente estadounidense, Donald Trump, que ha anunciado la retirada de su país del Acuerdo de París contra el cambio climático. Lo ha reiterado la alcaldesa, Manuela Carmena, durante la entrega de los premios del  Concurso Internacional Multi-Comfort House Arquitectura para estudiantes de Arquitectura, un certamen que cumple su decimotercera edición, reconociendo trabajos en materia de regeneración urbana. En este caso concreto, el objetivo ha sido una comunidad del perímetro del área del Gran San Blas, por lo que el área de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS) ha colaborado estrechamente con los organizadores en la definición de los objetivos y en su vinculación con las bases del plan MA-DRE. La alcaldesa ha agradecido a los estudiantes su participación y les ha alentado a seguir en ese camino de la sostenibilidad que  “nos llevará –dijo– a conseguir un mundo más justo y más igualitario”.

Carmena subrayó que en esa prioridad en la gestión municipal que es la sostenibilidad, un elemento imprescindible es incorporar soluciones que hagan que el parque inmobiliario sea mucho más eficaz desde el punto de vista energético. El Concurso Internacional Multi-Comfort House Arquitectura supone un paso más en esa línea. En él participan más de 100 escuelas de Arquitectura y Ciencias de la Edificación de alrededor de 30 países y consiste en la elaboración de propuestas por los estudiantes (que trabajan en equipos, por universidad), ante un determinado caso real, planteado de forma única para todos ellos. Los proyectos presentados al concurso debían desarrollar propuestas para mejorar el confort en cinco aspectos: accesibilidad, confort térmico, calidad del aire, confort visual y acústico.

Una línea de actuación asentada

Tal como explicó José Manuel Calvo, delegado de DUS, iniciativas como esta  están en la misma línea que algunas de las acciones impulsadas por su área como es el caso del Plan MAD-RE, una campaña “que nace con vocación de largo recorrido, destinada a mejorar la calidad de las viviendas, responder a los retos medioambientales de la ciudad y lograr una mayor cohesión social”. Con esa misión, el Plan MAD-RE ha destinado una serie de ayudas para actuar sobre el aislamiento de inmuebles, lo que supone conseguir ahorros entre el 70% y 80% en el coste de electricidad y gas. Con este plan, el Ayuntamiento pone de manifiesto la necesidad de concienciación de los ciudadanos para combatir la ineficiencia energética como un enemigo invisible que convierte a los edificios en “sumideros de energía”.

Para el concejal, “hay que avanzar en las políticas de sustitución de calderas, de bombillas y en políticas de intervención en las envolventes, fachadas y cubiertas. Pero debemos subrayar  que mejorar la eficiencia energética de nuestros edificios va más allá del ahorro en la factura de la luz. Es un eje estratégico de la lucha contra el cambio climático y la mejora del medio ambiente, y por tanto, es un problema que afecta a toda la ciudad”./